¿Por qué nace?


Este ministerio ha nacido, porque Dios ha llenado nuestro corazón con el mismo deseo que habia en el profeta Habacuc
“Oh Jehová, he oído tu palabra, y temí. Oh Jehová, aviva tu obra en medio de los tiempos, En medio de los tiempos hazla conocer; En la ira acuérdate de la misericordia”(Hab. 3: 2)
 

Nos ha estado abriendo su palabra para que veamos y entendamos sus caminos y obras en medio de todos los tiempos. Creemos que en nuestro tiempo, un tiempo de restauración, Él quiere manifestarse y darse a conocer gloriosamente por mediación de su pueblo santo y escogido. Aun cuando la maldad de los hombres va en aumento, Él desea que su pueblo clame por misericordia y así la mostrará.

Ministerio FUEGO VIVO es:

“Por lo cual te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti por la imposición de mis manos” (2 Tim. 1: 6)

Un ministerio con pasión por el avivamiento prometido para esta generación, que arde por ver la restauración de todas las cosas. Con un alcance internacional, sin limitación de denominaciones entre los nacidos de nuevo en el espíritu, y con pasión por alcanzar a los que están bajo condenación.

 

Visión ministerial “Fuego Vivo”

I. Unidad Pastoral

Nos proponemos lograr esta meta haciendo:

a. Trabajo interdenominacional unido con ministros de otras congregaciones

b. Apoyo práctico a otros ministerios

c. Desarrollando actividades conjuntas con otras congregaciones, tanto de manera local como internacionalmente.

 

II. Visión de restauración

Esta meta comprende la restauración de todas las cosas conforme al orden que Dios ya de antemano ha establecido para ellas. Nos enfocamos tanto en lo congregacional, es decir, restablecer el funcionamiento de la iglesia de Cristo conforme al modelo del libro de los hechos; como a lo personal, guiándonos por el estilo de vida de nuestro máximo ejemplo el Señor Jesucristo, así como por las instrucciones dejadas en su santa palabra.

 Es nuestra visión promover y ayudar en este proceso actual en el cual creemos que por indicación de Dios estamos involucrados (Hch. 3: 21)

 

III. Plantar y desarrollar iglesias

Esta meta es parte de la tarea fundamental que el señor Jesucristo nos dejo como “gran comisión” (Mt. 28: 18-20)

a. Predicando el evangelio en los lugares donde hay tanta necesidad del mismo

b. Estableciendo iglesias en esos lugares para la conservación adecuada de los frutos de la predicación

c. Supervisando el desarrollo de la congregación y supliendo para sus necesidades

d. Manteniéndonos conectados a ellas en unidad visible como parte del mismo y único cuerpo de Cristo

 

IV. Superación ministerial

Vemos que la tarea de superación de los creyentes llamados a los ministerios ha quedado casi exclusivamente en manos de los institutos bíblicos. Estos son una gran bendición, pero no todos los creyentes tienen acceso a superarse en los mismos por diferentes circunstancias. Sin embargo, estas limitaciones no eximen al creyente de la responsabilidad de su llamado.

Como ministerio “Fuego Vivo” queremos aportar en esta tan importante tarea:

a. Ayudando a los creyentes a que encuentren su llamado, ya sea tanto en oración como por mediación de la enseñanza de la palabra.

b. Creando un sistema de capacitación ministerial proveyendo herramientas útiles para los ministerios que deben ser puestos en acción. Esto incluiría     seminarios, bloques de enseñanza con materias básicas, y conectando a los creyentes con otros ministerios para que puedan tener experiencias prácticas en el área de servicio al cual han sido llamados.

 

V. Edificación activa del cuerpo de Cristo

Ponemos a disposición de la iglesia de Cristo:

a. Apoyo práctico al creyente con consejerías

b. Dictando discipulados de crecimiento espiritual

c. Servimos a las iglesias en las áreas donde tengan necesidades que estén a nuestro alcance suplir.

VI. Enfoque a la familia

Creemos firmemente que la familia es el núcleo de cada sociedad. Así también lo es de la iglesia. Tenemos un enfoque claro a la restauración y la atención a la familia como primera estructura en importancia para tener iglesias y sociedades saludables. Está en nuestro corazón el esforzarnos por apoyar a las familias para que regresen al orden del plan dictado por su creador.

a. Ofrecemos seminarios matrimoniales

b. Apoyo para el trabajo con la niñez

c. Seminarios para hombres y mujeres de manera que podamos alcanzar todo el potencial que en Dios nos ha sido dado.

d. promoviendo actividades que involucren a toda la familia de manera que se fomente la unidad en ellas.

 

DECLARACIONES

Es tiempo de restauración de todas las cosas que Dios ya había anunciado por boca de sus siervos los prfetas. Así como Daniel cuando servía a su generación descubrió en el rollo de las escrituras que había llegado el tiempo para salir del cautiverio, el Espíritu Santo nos ha iluminado para que entendamos que es el tiempo donde el pueblo de Dios ha de levantarse para experimente la liberación y el avivamiento, que hará que el nombre del Señor sea adorado hasta lo último de la tierra.

En la iglesia primitiva Dios se manifestaba maravillosamente. Era un pueblo poderoso en palabra y grandemente usado en las manifestaciones del poder de Dios. Nuestra convicción es que hoy la iglesia debe de regresar a este mnodelo ya que Dios sigue siendo el mismo. Pero factores nos estorban: Hay divición dentro del mismo reino, no hay unidad practica aun cuando sabemos que es la base para la fortaleza, no hay pasión por lo sobrenatural, estamos confiando mucho en nuestras capacidades e ideas huamanas. Un reino así no pude prevalecer.

Los nombres y títulos que nos hemos puesto no han dividido solamente a las congregaciones, sino que han construido una barrera entre los pastores y líderes. El mundo lo está observando y no deja de señalarnos.

Dios ha colocado esta carga en nuestros corazones y nos ha movido a clamar por ello. Ahora pasadno de la teoría a la práctica, ponemos el ministerio Fuego Vivo en función de este propósito divino. No es algo nuevo, sino parte de la respuesta de Dios a la oración de nuestro Señor Jesucristo antes de ser sacrificado por noostros en este mundo (Jn. 17)

No solo buscamos la unidad del cuerpo, sino tambien una unidad pastoral. Esto es una meta importante en esta visión. Queremos fomentarla teniendo encuentros pastoralesregularmente todos los años, para juntos buscar el rostro de nuestro común Señor en oración, para que nos revele su voluntad y propósito para nuestros ministerios, interceder los unos por los otros y compartir las experiencias y necesidades del ministerio, para poder motivarnos mutuamente. Quereos así destruir las barreras denomminacionales. Todos somos hijos y servimos al mismo Padre y estamos llamados a la unidad para que el mundo vea y crea.

Queremos dar de gracia lo que por gracia hemos recibido. La experiencia y capacitación que hemos adquirido, ofrecemos depositarla en nuevos líederes que se están formando, creando así un ejercito alistado y preparado para ser útiles en toda buena obra. Seminarios, conferencias, tiempos de práctica estará a disposición de los miembros de las congregaciones.